Una grave situación de orden público se ha venido presentando en el departamento de Chocó, especialmente en el municipio de Istmina. Según las autoridades de esa región hay desplazamiento de por lo menos 150 personas de tres corregimientos, Doidó, Chambacú y Negría.
Ante esta situación, el Obispo de la Diócesis de Istmina-Tadó, Monseñor Mario de Jesús Álvarez, informó que mientras que las familias sienten miedo, padecen hambre, frío y mantienen la zozobra, la Iglesia Católica en ese territorio está apoyando a las comunidades afectadas.
De igual modo, el Obispo de esta Iglesia Particular invitó a las guerrillas que están haciendo presencia en ese territorio para que cese la violencia e invitó a la ciudadanía a seguir orando por aquellas personas que continúan afectadas en esa región.