Tras el encuentro de los arzobispos de las provincias eclesiásticas de Bogotá, han destacado en su pronunciamiento la amplia disposición de escucha que encontraron allí por parte de los prefectos y de sus equipos de trabajo. Afirmaron que recibieron luces, motivaciones y esperanzas para continuar el camino evangelizador y sinodal en Colombia.
Han dado a conocer no solo aspectos concretos de la iglesia colombiana a partir de la realidad de cada una sus jurisdicciones eclesiásticas, sino también situaciones asociadas al contexto social, político y económico del país, que preocupan ampliamente a los prelados y que también representan desafíos para su misión.
Diferentes recomendaciones surgieron desde los dicasterios para el fortalecimiento de la tarea evangelizadora de la iglesia que peregrina en Colombia. Algunas de ellas sobre temas como: La educación en instituciones católicas, las vocaciones, la fuerza de los laicos, la importancia de las parroquias, los retos de la catequesis frente a las nuevas dinámicas sociales y los lenguajes digitales, el trabajo de las pastorales sociales, la promoción de la ecología integral, la relevancia de la comunicación para la evangelización, el cuidado de la vida religiosa y los tribunales eclesiásticos.
La segunda fase de la Visita Ad Limina 2023 será en abril. El segundo grupo, en el que se encuentran los prelados de las provincias de Barranquilla, Cali, Cartagena, Manizales, Medellín, Santa Fe de Antioquia y Popayán, la desarrollará del 17 al 22 de abril.