En la mañana de este lunes, 15 de abril, a sus 91 años de edad.
El Cardenal Pedro Rubiano Sáenz, nació en Cartago Valle el 13 de septiembre de 1932, fue Presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia durante dos periodos consecutivos, entre 1990 y 1993, y de 1993 a 1996.
Según el Episcopado del país, el purpurado fue ordenado sacerdote en 1956 para la Arquidiócesis de Cali, posteriormente, en 1971, el Papa Pablo VI lo nombró Obispo de Cúcuta, más adelante el 26 de marzo de 1983 fue nombrado Arzobispo Coadjutor de Cali con derecho a sucesión por el Papa Juan Pablo II y dos años más tarde, en 1985, fue designado Arzobispo de esta misma jurisdicción eclesiástica.
Posteriormente, fue trasladado a la Arquidiócesis de Bogotá el 27 de diciembre de 1994 y tomó posesión de la sede primada de Colombia el 11 de febrero de 1995.
Fue creado Cardenal el 21 de febrero del 2001; recibió la birreta roja y el título de la Transfiguración de Nuestro Señor Jesucristo, ese mismo año asistió a la décima Asamblea Ordinaria del Sínodo Mundial de Obispos en Ciudad del Vaticano.
El Papa Benedicto XVI aceptó su renuncia al gobierno pastoral de la Arquidiócesis de Bogotá el 8 de julio de 2010.
Según el Episcopado del país, el Cardenal Pedro Rubiano Sáenz fue reconocido por sus aportes a la Pastoral Educativa, el vínculo matrimonial y por ser miembro y creador de varias comisiones de paz, entre ellas, la Comisión de Conciliación Nacional de la Conferencia Episcopal de Colombia, organismo que fue convocado por el purpurado el 4 de agosto de 1995 bajo el propósito de buscar soluciones políticas al conflicto armado colombiano que en aquella época pasaba por su momento más álgido.
Cabe destacar que las exequias tendrán lugar el miércoles 17 de abril a las 10 de la mañana en la Catedral Primada de Bogotá.
También es muy importante tener en cuenta que los restos mortales del Cardenal reposarán para siempre en la Catedral de Bogotá, en la Capilla de Nuestra Señora de los Dolores.